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Foto del escritorFrank Socualaya

PENSAMIENTOS POSITIVOS, VIDA POSITIVA



Tener pensamientos positivos es algo que ayuda a vivir de forma feliz. Y no soy la única que lo piensa. Ya en siglo II d.c., el emperador romano Marco Aurelio dijo eso de “la felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos”.

¿Te has parado a observar la calidad de tus pensamientos? ¿A ver si las cosas que dices o los mensajes que te mandas son positivos o negativos?

Imagínate que cada mañana, al levantarte, das la mano a una persona que durante todo el día te acompaña. Y te va contando, o anticipando, la cantidad de cosas que pueden salir mal, la cantidad de personas que te pueden decepcionar o los innumerables retos que vas a tener que afrontar.

¿Cómo de feliz crees que estarías? Pues… más bien poco.

La necesidad de cambiar los pensamientos

Cuando tu vida está gobernada por los pensamientos negativos, tu enfoque o tu atención se dirigen a aquello que te falta. Ya sea material o emocional. Tu mente se convierte en un gran foco que solo alumbra aquellos hechos que confirman que, si algo puede salir mal, saldrá.

Tu realidad está sesgada, porque, si recuerda el ultimo post, todas las cosas tienen dos lados, uno positivo y otro negativo. Y de ti depende querer mirarlo todo o quedarte solo con una parte.

Revisa tus pensamientos negativos, los mensajes que te mandas, las emociones que te están generando. Y pregúntate si esos pensamientos son ciertos. Y si es una realidad que solo te pasen cosas negativas.

Probablemente, la respuesta a esas preguntas, sea «no». Afortunadamente, la vida se compone de momentos de luces y sombras.

Ahora bien, si quieres tener una vida positiva, una vida exitosa y de objetivos logrados, tienes que empezar por cambiar esos pensamientos negativos por otros positivos.

Tener pensamientos positivos y hablar en positivo te predispone a tener un mejor estado de animo y una mejor actitud ante la vida. Son como la gasolina que necesitas para crear la llama de la motivación.

O, la energía para ir hacia tus objetivos y la voluntad para seguir adelante pese a las dificultades.

A priori, esto que parece fácil, se complica un poco en la realidad del día a día. Igual te sorprende si te digo que hay estudios que demuestran que tenemos alrededor de 60.000 pensamientos al día. Y, de ellos, el 80% son negativos. Increíble, ¿verdad?

Sin embargo, la cosa mejora cuando descubres que ser positivo o pensar en positivo no tiene que ser una cualidad innata, sino que se puede adquirir. Si quieres, con voluntad, dedicación y perseverancia, lo puedes conseguir.

Como siempre digo… cambia tu enfoque, cambia tus pensamientos y cambiarás tu mundo.

Cómo tener pensamientos positivos

Te dejo 3 ejercicios prácticos que, desde mi experiencia de Psicóloga y Coach, sé que te pueden ayudar a crear este nuevo hábito en tu vida.

1.- Usa palabras positivas

El lenguaje crea realidades y las palabras tienen mucho poder. No es lo mismo levantarte y decirte, “vamos a ver si hoy no me pasa nada malo” que decirte “vamos a ver que me depara el día”.

Tus palabras reflejan tus pensamientos. Y, si te acostumbras a usar palabras positivas, o eliminar el «no» y la queja de tu vida, tus pensamientos irán también cambiando. Esto no quiere decir que, de pronto, te conviertas en un conferenciante motivador. Pero, por lo menos, si al levantarte te dices cosas positivas y te pones objetivos positivos, poco a poco, tu mente se ira acostumbrando a ver una realidad que antes estaba sesgada por la negatividad.

2.- Trabaja la gratitud

Acostúmbrate a dedicar unos minutos al día (por la mañana o por la noche) a agradecer todo aquello que tienes. ¡No des nada por sentado! Estoy segura de que ves normal tener luz y agua. Pero, quizás, en los tiempos que estamos viviendo, no sea algo natural para todo el mundo.

Agradece también los halagos, las felicitaciones y los detalles que las demás personas tengan hacia ti. Sonríe y da las gracias. Te ayudará a mantener un enfoque positivo y eso te ayudará a sentirte más feliz.

3.- Acepta que no todo es perfecto y que solo puedes manejar el momento presente

Cuando antes te liberes de la necesidad de que todo sea perfecto, o salga tal y como tu crees que tiene que salir, antes te liberarás de los pensamientos negativos asociados a la pérdida de las expectativas. Y, por supuesto, a la decepción y frustración que éstas llevan asociadas.

Ya sabes que hay muchas situaciones que se escapan de tu control y que la vida no es perfecta. Acéptalo y céntrate en aquellas cosas que sí están pasando y en cómo puedes mejorarlas. Si es que realmente dependen de ti.

Una actitud proactiva ante la vida y las situaciones te ayudará a salir del victimismo y pasar a la acción. Tus resultados mejorarán y, en consecuencia, tu actitud será mas positiva.

Para terminar, pero no por ello menos importante, en la medida de lo posible, rodéate de personas positivas. Recuerda que pensar en positivo es un hábito, así que, cuantos más ejemplos tengas a tu alrededor, más fácil te será pensar y actuar positivamente.

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